El cantante cubano Eduardo Antonio, conocido cariñosamente como El Divo de Placetas, está atravesando uno de los momentos más tristes de su vida. Su madre, Olguita, falleció en Cuba víctima del dengue, una enfermedad que se ha propagado sin control por toda la isla ante la total incapacidad del régimen para enfrentarla.
Visiblemente afectado, el artista compartió un mensaje lleno de emoción en sus redes sociales para despedirse de la mujer que consideraba su luz y su motor. “Gracias a todos mis amigos y seguidores que han estado pendientes de la salud de mi madre. Lamentablemente, en Cuba se vive en este momento una pandemia de dengue que le dio partida a mi madre el día de hoy”, escribió con el corazón en la mano.
El Divo se despidió con palabras que desgarran: “Mami, serás el adiós más doloroso y amargo que he dado. Gracias por cada minuto que me diste, por tu guía y tus valores. Sé que desde el cielo seguirás alumbrándome con tu luz y tu energía. Guárdame un pedacito allá arriba junto a papi. Salúdame a mi niña Claudia y a mi tía Reina”.
Con la voz quebrada por el dolor, el artista prometió que seguirá adelante con la fuerza que su madre le enseñó. “Te amo, madre mía, por siempre. Me quedo con tu amor y tu alegría. Nunca imaginé que el dolor de perderte sería tan oscuro y profundo. Prometo no defraudarte ni como hombre ni como artista. Daré siempre lo mejor de mí, como tú me enseñaste”, expresó, dejando claro que la pérdida no lo detendrá, sino que le servirá de impulso.
Una tragedia marcada por la crisis sanitaria en Cuba
La muerte de Olguita no es un caso aislado. En Cuba, el dengue se ha convertido en una verdadera pesadilla para las familias, especialmente en provincias del centro y oriente del país. Los hospitales colapsan, los medicamentos escasean y el silencio del régimen agrava aún más la desesperación del pueblo.
Mientras el gobierno intenta maquillar la crisis sanitaria con discursos vacíos, cientos de cubanos enfrentan la enfermedad sin atención médica adecuada ni condiciones mínimas de higiene. En ese contexto, la partida de la madre del cantante resalta la indolencia del sistema de salud cubano, que hace tiempo dejó de priorizar la vida de la gente para servir solo a los intereses del poder.
Una madre orgullosa de su hijo
Eduardo Antonio recordó con ternura cómo su madre siempre fue su fan número uno. “Tu mejor medicina siempre fue mi triunfo y el aplauso de mi público, ese mismo público al que hoy le pido su apoyo. Te seguiré cantando con el pecho apretado, pero con más amor y fuerza que nunca. Tu bendición será siempre mi punto de partida. Por siempre vivirás en mi corazón, Olguita, mi madre hermosa”, escribió el artista, dejando ver que el escenario será su refugio y su forma de mantener viva su memoria.
A pesar del profundo dolor, Eduardo Antonio decidió no cancelar sus próximas presentaciones, asegurando que cantará en honor a su madre. Según contó su esposo, Roy García, el artista no ha podido viajar a Cuba para despedirse de ella debido a las limitaciones de vuelos y los altos costos, una situación que refleja otra de las tantas trabas que enfrentan los cubanos incluso en sus momentos más duros.
El cantante ha recibido muestras de cariño y solidaridad de miles de seguidores, amigos y colegas del medio, quienes le han enviado mensajes de apoyo y consuelo en redes sociales.
En medio del dolor, el Divo de Placetas se aferra a la música y al recuerdo de su madre como su fuerza para seguir adelante. Porque, como él mismo dijo, “el amor de una madre nunca muere, solo cambia de forma y se queda para siempre en el alma”.
