Desde Fomento, en Sancti Spíritus, hasta las Islas Canarias, dos amigos cubanos han conquistado Tenerife con su negocio de productos cárnicos ahumados al más puro estilo criollo. Su especialidad, el jamón de pierna ahumado, ya se ha ganado el corazón —y el paladar— de muchos canarios, además de la comunidad cubana que vive en España y no olvida el gusto de casa.
La historia fue contada por el creador de contenido Roberlán Fariña (@roberlan.farina), quien visitó la charcutería y mostró cómo estos dos emprendedores han sabido llevar el sabor cubano a otro nivel, mezclando tradición, ingenio y el deseo de salir adelante lejos del control asfixiante del régimen.
En su local preparan de todo: chuletas, pollo, jamón de pierna y el popular jamón viking, todos elaborados con esas técnicas de ahumado que tanto se dominan en la isla y que ahora brillan en tierra canaria. Cada pieza lleva ese toque que solo un cubano sabe darle cuando cocina con pasión y memoria.
Estos amigos, que se reencontraron años después en España tras estudiar juntos en su pueblo natal, decidieron unir fuerzas y apostar por sí mismos, algo que en Cuba sería casi imposible por la burocracia, los impuestos abusivos y el acoso estatal contra los pequeños emprendedores.
Hoy su charcutería es mucho más que un negocio: es un símbolo de superación y libertad, un recordatorio de que los cubanos no emigran solo para sobrevivir, sino para crear, prosperar y demostrar lo que pueden hacer cuando nadie los limita.
