El oriente cubano vuelve a estar en vilo. Fuentes locales y usuarios en redes sociales reportan un inminente peligro de desbordamiento en la presa Cauto del Paso, que, según los reportes, ya estaría por encima de su capacidad máxima. La tensión se siente en cada rincón de la zona, donde cientos de familias han comenzado a evacuar ante el temor de una catástrofe.
De acuerdo con varios testimonios publicados en redes, las comunidades de Cauto Embarcadero y Miradero serían las más expuestas ante la crecida del río Cauto, por lo que las autoridades habrían ordenado una evacuación inmediata.
La emisora Radio Cabaniguán Jobabo, de Las Tunas, confirmó que el Consejo de Defensa Municipal de Jobabo recibió a unas 800 personas provenientes de Guamo, Granma, trasladadas de urgencia en tren por el riesgo de inundaciones. Las autoridades locales estiman que entre 5 000 y 7 000 personas podrían ser evacuadas hacia esa zona si la situación continúa empeorando.
Mientras tanto, desde el Consejo de Defensa Municipal de Río Cauto intentan transmitir calma. En una publicación oficial aseguraron que “la presa no representa peligro”, y que las inundaciones actuales se deben únicamente al aumento del caudal del río Cauto, alimentado por escurrimientos de agua provenientes de Holguín, Las Tunas y el afluente Salado, tras el paso del huracán Melissa. Según su versión, “no habrá un golpe de agua repentino”.
Pero en el terreno, los vecinos cuentan otra historia. En redes sociales se multiplican los testimonios de desesperación y las denuncias de falta de información. La usuaria Day P. Figuedo Pino escribió en Facebook un mensaje angustiante: “Por favor compartan, el padre de mi hijo me llamó desesperado desde Cauto del Paso, están encima de la bodega, su teléfono tiene solo 13 por ciento de carga. Dijeron que irían a buscarlos y todavía no ha llegado nadie. ¿Van a esperar a que pase lo peor?”
En otra publicación, la mujer reclamó que el pueblo está totalmente desinformado, mientras el agua sigue subiendo y la gente no sabe qué hacer ni a dónde acudir. “Estamos sin corriente desde el lunes a las dos de la tarde y sin comunicación. ¿Cómo es posible que digan que el nivel está bajando cuando el agua sigue entrando en Grito de Yara?”, cuestionó.
La presa Cauto del Paso, considerada la más importante del oriente cubano y la mayor de la provincia de Granma, se ha convertido en un foco de preocupación nacional. La mezcla de silencio oficial, rumores y reportes de vecinos atrapados en zonas anegadas solo aumentan la sensación de caos y abandono.
Una vez más, el régimen intenta controlar la narrativa desde los medios estatales, mientras en el terreno la realidad se impone: familias atrapadas, comunidades incomunicadas y un pueblo que exige respuestas ante una amenaza que crece cada hora.
