Si hay algo que rompe y recompone a la vez a los cubanos que viven fuera, son los reencuentros. Y esta vez, una joven cubana logró que miles se limpiaran las lágrimas del celular al compartir el instante exacto en que volvió a abrazar a su familia en Cuba después de tres años sin verlos. Tres años que, para cualquiera que haya emigrado, se sienten como una vida entera.
La protagonista del video es la usuaria de TikTok @dianalauradortamo, quien decidió grabar el momento en que abre la puerta de su casa, respira hondo, y corre directo hacia su hermano. Ese abrazo, fuerte, apretado, lleno de todo lo que tuvieron que aguantarse en videollamadas, fue suficiente para partir el alma en dos.
Y por si fuera poco, justo detrás aparece la abuela: una mezcla de risas, lágrimas y amor viejo del bueno, de ese que se extraña hasta en los huesos. Ella se acerca despacito, temblando de emoción, para sumarse al abrazo familiar que, en segundos, se volvió viral.
“Reencuentro con mi familia 3 años después”, escribió Diana Laura. Solo esas palabras y un video de pocos segundos bastaron para que miles de cubanos —dentro y fuera de la isla— sintieran ese nudo en la garganta. Porque no es solo un reencuentro. Es la historia de todos.
Los comentarios no se hicieron esperar.
“Mis lágrimas aquí cayendo”, dijo una seguidora que, como muchos, sintió que estaba viviendo el momento con ellos.
Otra escribió: “La unión familiar se siente bien profundo, tus abuelitos, tu hermanito… eso es único”.
Y luego llegó la frase que terminó de definir el espíritu del video:
“Esos abrazos de los viejos curan el corazón”.
Porque es verdad. No hay medicina para la nostalgia como el abrazo de una abuela. Es un parche emocional que te devuelve la fuerza para seguir adelante.
El clip ya acumula miles de reproducciones y reacciones, convirtiéndose en uno de esos videos que no se miran una sola vez. No. Estos son los que vuelves a ver cuando extrañas, cuando te duele, cuando necesitas recordar por qué vale la pena tanto sacrificio.
Este reencuentro forma parte de un fenómeno que crece en redes: cubanos mostrando la explosión de emociones al volver a casa después de años afuera. Una mezcla de alegría, tristeza, orgullo y dolor por la migración que ha separado a miles de familias debido a la crisis que vive la isla.
Al final, estos videos no son solo contenido viral. Son una ventana a la realidad emocional de una generación entera que se fue buscando futuro, dejando atrás lo más puro que tenían: sus abrazos. Y cada video como este nos recuerda lo mismo: el hogar no siempre es un lugar… a veces es un abrazo que esperamos por años.










