Una familia de La Hata, en Guanabacoa, quedó literalmente en la calle después de que un incendio arrasara su casa la noche del martes. El fuego se desató justo cuando por fin regresó la corriente, tras un apagón de 12 horas que dejó al barrio a oscuras y, como suele pasar en Cuba, con la tensión eléctrica bailando a su antojo.
La influencer Yarelys Herrera Díaz fue quien mostró las primeras imágenes del desastre. Contó que, al volver la electricidad, lo que llegó no fue alivio, sino una lengua de fuego que devoró la vivienda en cuestión de minutos. Ella misma lo dijo con una mezcla de tristeza y rabia: “La corriente llegó acompañada de la única luz que no quieres ver cerca de tu casa, la de un incendio.”
La casa era humilde, hecha de bloques, zinc y madera, como tantas en La Habana profunda. Y quedó reducida a cenizas. Lo único que puede considerarse un alivio es que nadie resultó herido, ni siquiera Danielón, un vecino muy conocido del área.
Los bomberos llegaron rápido y, según Herrera, actuaron con una eficiencia que contrastó brutalmente con la precariedad que rodea al sistema eléctrico cubano. Pero ni su rapidez pudo salvar lo que ya estaba perdido.
Mientras las llamas subían, los vecinos vivieron momentos de puro pánico. El creador Yerry Sanabia Padrón también compartió videos donde se ve la columna de humo elevándose sobre La Hata y a decenas de personas mirando, impotentes, cómo el fuego amenazaba con alcanzar otras casas igual de vulnerables.
Hasta ahora no existe ni un solo comunicado oficial sobre el siniestro, ni se sabe si la familia ha recibido ayuda de las autoridades. No sorprende: en Cuba, el Estado aparece rápido para culpar al bloqueo, pero nunca para responderle al pueblo cuando pierde todo.
Este no es un caso aislado. En las últimas semanas se han multiplicado los incendios en viviendas, muchos provocados por la misma receta de siempre: apagón, voltaje inestable, cables viejos, instalaciones remendadas y un sistema eléctrico en coma. En uno de esos incendios recientes, ocurrido en un edificio de Plaza de la Revolución, una persona perdió la vida.










