La abogada Liudmila Marcelo lanzó una advertencia que ha puesto a temblar a más de un cubano con caso de asilo en Estados Unidos. En conversación con nuestra redacción, reveló que el gobierno estadounidense está presentando mociones de última hora, a veces horas o días antes de las audiencias migratorias, para tumbar casos de asilo de cubanos y enviarlos a terceros países como Uganda o Ecuador, bajo el argumento de que deben “defender el asilo desde allí”.
Según explicó, este fenómeno empezó a golpear directamente a sus clientes cubanos en fechas muy recientes. Marcelo aseguró que ya ha recibido tres mociones en casos de nacionales de la Isla, algo que hasta ahora no era habitual. La estrategia, dice, busca evitar que el solicitante llegue a una audiencia final de asilo en Estados Unidos, sosteniendo que puede ser removido a otro país para continuar el proceso desde allá.
La base legal que estaría usando el gobierno sería un supuesto “acuerdo de cooperación para asilo”, aplicable a personas que ingresaron después de 2019. Marcelo aclaró que antes veía este tipo de maniobras con migrantes centroamericanos, a quienes intentaban enviar a países como Honduras o El Salvador, sin importar su país de origen real. En el caso de los cubanos, recalcó, eso no ocurría… hasta ahora. “Ya empezó a pasar”, advirtió sin rodeos.
En las cortes, el panorama es tenso y caótico. La abogada describió situaciones en las que el fiscal presenta la solicitud en plena audiencia, y aunque el abogado defensor se oponga, el juez termina dándole la razón al gobierno. En otros casos, la moción llega por escrito poco antes de la cita, obligando a preparar una respuesta contrarreloj. El resultado puede ser demoledor: si la persona no demuestra temor de permanecer en Uganda o Ecuador, es enviada a esos países y obligada a defender allí su asilo.
Marcelo calificó esta práctica como “bien grave” y la definió como el último recurso para dejar a los solicitantes sin derecho real a litigar su asilo en EE.UU.. “No te están dando ni la oportunidad de llegar a tu corte final”, afirmó, señalando que ahora las autoridades se están apoyando en el llamado ACA para justificar estas decisiones.
Lo más preocupante es que, según explicó, no se reinicia el proceso con una entrevista de miedo creíble. Simplemente se desestima el caso en Estados Unidos y se envía al solicitante a un país en el que nunca ha estado, donde además debe probar que también teme permanecer allí. Un absurdo legal que coloca a los cubanos en una situación de extrema vulnerabilidad.
Ante este escenario, la defensa se vuelve cuesta arriba. Marcelo contó que está tratando de comparar las condiciones políticas de Uganda y Ecuador con las de Cuba, ya que la mayoría de sus clientes solicitan asilo por oposición política. La idea es demostrar que, si una persona es perseguida por enfrentarse a un régimen autoritario como el cubano, ese riesgo no desaparece mágicamente en otro país. “Si tienes una opinión política contraria al autoritarismo, la vas a tener dondequiera”, explicó, aunque reconoció que la situación está muy difícil.
Los afectados, según la abogada, son principalmente cubanos con I-220A, que se encuentran en libertad mientras sus casos avanzan en corte. La moción implicaría que su asilo lo “esperen” en Uganda o Ecuador, sin claridad aún sobre si sería en detención o no. Hasta el momento, dijo, no tiene constancia de que la medida ya se haya ejecutado en sus casos, precisamente porque es algo tan nuevo que empezó la semana pasada para cubanos específicamente.
Para Marcelo, el mensaje es claro y preocupante: la comunidad cubana ya no es “intocable” en las cortes migratorias de Estados Unidos. Que hoy se plantee seriamente enviar a cubanos a defender su asilo en países como Uganda o Ecuador marca un giro drástico en el trato que venían recibiendo. Y, como telón de fondo, sigue estando la misma realidad de siempre: un régimen en Cuba que empuja a su gente al exilio, mientras ahora muchos se enfrentan al riesgo de quedarse sin refugio incluso fuera de la Isla.
