La noche del martes, un apartamento del edificio 19 en el reparto Bahía, La Habana del Este, se convirtió en escenario de un incendio mientras sus ocupantes cocinaban con leña durante un apagón, reportó la activista Lara Crofs en Facebook.
El siniestro se produjo alrededor de las 7:00 pm en el tercer piso del inmueble, cuando la falta de electricidad llevó a los residentes a improvisar métodos de cocción peligrosos. Los bomberos llegaron con rapidez y lograron controlar las llamas, evitando que el fuego se propagara a otras viviendas. Por suerte, no se reportaron heridos, aunque sí se registraron daños materiales en el apartamento afectado.
Este incidente refleja un problema mucho más amplio: los apagones prolongados y la precariedad de las viviendas obligan a miles de familias a recurrir a alternativas arriesgadas para satisfacer necesidades básicas como la alimentación. La falta de opciones seguras convierte la rutina en un riesgo constante, donde accidentes domésticos podrían derivar en tragedias.
El incendio en el edificio 19 se suma a una serie de incidentes similares que se han registrado en toda la capital y el país durante la creciente crisis energética en Cuba. Los cortes de electricidad, que pueden durar horas o incluso días, dejan a la población a merced de métodos improvisados que comprometen su seguridad y ponen en evidencia la falta de infraestructura y soluciones confiables.
Aunque en este caso la historia tuvo un final sin víctimas, el suceso deja una señal de alerta clara sobre los peligros cotidianos que enfrentan las familias cubanas y la urgencia de respuestas estructurales que eviten que la falta de electricidad siga provocando incendios, pérdidas materiales y riesgos humanos.
