La Navidad siempre llega cargada de sentimientos, pero para los cubanos —dentro y fuera de la Isla— esas fechas pesan un poquito más. Nostalgia, recuerdos, llamadas a deshora y mesas incompletas forman parte del combo. Justo en medio de esa realidad, Jacob Forever, El Chacal y Divan decidieron ponerle música al sentimiento colectivo con una colaboración que ya muchos llaman un himno: “A mí me va bien”.
La canción, estrenada esta semana, llega como un abrazo sonoro para quienes pasan estas fiestas lejos de casa. No es un tema de lujo ni de excesos, sino de esperanza, fe y ganas de seguir pa’lante, incluso cuando las cosas no han sido fáciles. Desde los primeros segundos, el mensaje es claro: creer que lo mejor todavía está por venir.
A esta unión musical también se suma Ernesto Losa, reforzando ese espíritu de hermandad que tanto necesita hoy el género urbano cubano. Más que una colaboración comercial, el tema se siente como un mensaje colectivo, pensado desde la vivencia real del cubano que resiste, sueña y no se rinde.
El corazón de la canción está en su estribillo, que repite una idea sencilla pero poderosa: todo puede cambiar para bien. Una letra directa, sin adornos, que conecta con cualquiera que haya tenido un año duro, pero todavía conserve la fe en el futuro.
“Que a mí me va bien bonito,
que todo cambió, se siente rico.
En estas Navidades dime cómo te explico
que para el año nuevo todo será bonito…”
Esa repetición funciona casi como un mantra, una afirmación positiva para cerrar el año con buena vibra y abrir el próximo con esperanza renovada.
El videoclip acompaña perfectamente ese mensaje. Jacob Forever aparece junto a sus tres hijos, un detalle que no pasa desapercibido y que refuerza visualmente el valor de la familia. No hay excesos, ni escenarios forzados: hay cercanía, sonrisas reales y ese calor que muchos cubanos extrañan cuando están lejos de los suyos.
Al anunciar el estreno en Instagram, Jacob dejó claro para quién va dirigida la canción. “Esta canción es para Navidad, pero también para los que tienen a su familia lejos y siguen luchando para que todo esté bien”, escribió. Un mensaje que conecta de inmediato con la diáspora cubana, especialmente con quienes trabajan duro fuera para ayudar a los que quedaron atrás.
La invitación es clara: compartir el tema con esa persona especial que no puede estar presente en la mesa navideña. Porque aunque no se pueda dar el abrazo físico, la música también une, consuela y acompaña.
Más allá de la fecha, “A mí me va bien” es una canción que habla de resistencia emocional. De mirar atrás, reconocer lo vivido, pero no quedarse atrapado ahí. De agradecer lo poco o lo mucho, y seguir de pie, incluso con la nostalgia a cuestas.
Con este lanzamiento, Jacob Forever, El Chacal y Divan logran algo que no siempre es fácil: ponerle palabras y melodía a un sentimiento colectivo. Un tema que no solo suena en Navidad, sino que se queda como banda sonora de todos los cubanos que, pase lo que pase, siguen creyendo que el año que viene puede ser mejor.










