Detienen en México a dos jóvenes cubanos que se hacían pasar por “influencers” para robar artículos de alto valor de las suites de hoteles donde se hospedaban

Ines Sanz

Detienen en México a dos jóvenes cubanos que se hacían pasar por "influencers" para robar artículos de alto valor de las suites de hoteles donde se hospedaban

En vehículos de lujo y vistiendo ropa de marca, así llegaban a hoteles de cinco estrellas un par de cubanos que se hacían pasar por “influencers”, pero todo esto solo era parte de un montaje que utilizaban para robar artículos de valor de las suites.

Como parte de su modus operandi, los delincuentes también aprovechaban para hurtar alguno de los automóviles que estaban estacionados en los hoteles en los que se hospedaban, los cuales están ubicados en zonas exclusivas de la Ciudad de México, como Santa Fe, Polanco, y San Ángel.

Las investigaciones realizadas por la Fiscalía General de Justicia (FGJ) capitalina indican que estos individuos están relacionados en al menos tres atracos similares, esto al identificar a los sospechosos en los videos de las cámaras de seguridad de los establecimientos en los que se registraron robos con esta modalidad.

Fue el jueves 10 de junio cuando un par de amantes de lo ajeno de nacionalidad cubana fueron detenidos en la alcaldía Cuajimalpa, donde fueron sorprendidos por empleados de un hotel antes de que huyeran con una camioneta valuada en un millón de pesos y con artículos de la suite, cuyo valor ascendía a más de 40 mil pesos.

Según el parte oficial los trabajadores de seguridad del negocio observaron una actitud sospechosa por parte de estos “clientes”, quienes rondaban por los pasillos del hotel a tan solo unos minutos de haberse hospedado. “Parecía que estaban ubicando los puntos en donde había cámaras de seguridad”, dijo uno de los empleados a las autoridades.

Y es que era difícil que pasaran desapercibidos pues su aspecto físico era llamativo, ya que tenían tatuajes en casi todo su cuerpo y vestían ropa extravagante. Los elementos de seguridad también ubicaron a los cubanos grabando videos en el estacionamiento del hotel, y al ser cuestionados aseguraron que eran parte del material que subirían a sus redes sociales, ya que eran “influencers”.

Más tarde uno de los clientes del hotel bajó al loby y les dijo a los empleados que la alarma de su camioneta Rangerover se había activado. Acompañados del dueño del vehículo los guardias se dirigieron al estacionamiento, donde se percataron que el vehículo no estaba. Pero a través de las cámaras de seguridad observaron que la camioneta iba saliendo del hotel.

Al marcarle el alto notaron que los tripulantes que pretendían escapar con la camioneta eran los supuestos “influencers”, a quienes entregaron a elementos de la Policía Auxiliar (PA) de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), los cuales al revisar el vehículo encontraron artículos de la suite en la que se hospedaron, entre los objetos estaban la pantalla de la habitación que era de 48 pulgadas.

Este golpe que intentaron ejecutar en un hotel de la zona de Santa Fe lo lograron planificar y realizar en las tres horas que estuvieron hospedados, de acuerdo a fuentes de la Secretaría de Seguridad Ciudadana y de la Fiscalía General de Justicia de la CDMX.

Cifras oficiales de la Fiscalía capitalina indican que en abril pasado se registraron 878 robos a negocio sin violencia, mientras que un mes antes hubo 944 carpetas de investigación por este delito.

Aunque este modus operandi de hacerse pasar por “influencers” es nuevo, elementos de la Policía capitalina consultados al respecto aseguraron que los robos en los hoteles es recurrente.

“Recibimos recurrentemente reportes de robos sin violencia en los hoteles de la zona de Santa Fe, porque esos están bien equipados, tienen habitaciones que cuentan con muchos artículos de valor, lo que los hace un objetivo atractivo para los ladrones que se dedican a robar en esos lugares”, dijo un agente, quien prefirió reservar su identidad.

El elemento de la SSC señaló que los objetos que más se roban son los artículos de belleza, como secadoras, tenazas, o cables e incluso las cajas fuertes de las habitaciones que no exceden de un peso máximo de cinco kilos.

Por esto afirmó que los robos de carros y pantallas que hicieron los cubanos empezaron a llamar la atención de las autoridades y así fue más fácil ligarlos a los tres atracos que se cometieron con el mismo modus operandi.

Las autoridades no descartan que haya más cómplices o bandas que comiencen a imitar esta modalidad de robo, ya que les dio resultado a los cubanos, quienes obtuvieron en sus robos anteriores motines de miles de pesos.