Carreras clandestinas de caballos, la diversión de un domingo en Cuba

Redacción

Carreras clandestinas de caballos, la diversión de un domingo en Cuba

De los domingos en Cuba se dice que son particularmente aburridos. Sin embargo, nada que ver para los amantes de las rancheras y los caballos que se dan cita en una cafetería de las inmediaciones de la UCI (Universidad de Ciencias Informáticas).

Cuando comienza a caer la tarde, no son pocas las personas que se acercan al lugar, lo mismo a caballo, carretas o incluso en camiones desde otros municipios. El objetivo es bien claro: beber y apostar a la “araña” (carreta tirada a caballo) más veloz en las carreras.

El tipo de carretas con caballos utilizadas en estos topes se les conoce popularmente como “arañas” y son “tuneadas” con el objetivo de volverlas más veloces y livianas. A algunas incluso se le incorporan baterías para alimentar equipos de audio. Las carreras comienzan sobre las 6:00pm y existen varias modalidades.

“Hacemos esto para divertirnos. No hay muchas opciones de entretenimiento los domingos, así que nos juntamos y entre todos compramos ron y pasamos un rato agradable. No sólo son las apuestas en las carreras, en estas reuniones también se cierran negocios y se intercambian animales y ‘arañas’”, cuenta Bárbaro Harriera, un corredor de “arañas”.

Las carreras, sin embargo, son el plato fuerte del evento. Las arañas de los participantes se revisan al detalle antes de cada carrera.

“Revisamos desde los rodamientos, hasta que las gomas tengan suficiente aire o que los arreos estén bien amarrados y seguros. No es mentira que han ocurrido algunos accidentes, aunque por suerte ninguno ha sido fatal. Lo principal sin contar el jinete es el caballo. Una araña puede estar muy buena que, si el caballo no hace lo suyo no gana”, detalla Enrique Carvajal, conocido como “El Yuma” y jinete de una “araña” que el mismo bautizó como “El pájaro negro”.

En el sitio se dan cita también algunos estudiantes de la UCI, quienes hacen hasta lo imposible por no perderse las carreras.

“Nunca me las pierdo, la diversión está garantizada. Yo no me meto en eso de las apuestas, ya que aparte de no tener el dinero para hacerlo, he visto no pocas broncas grandes por dinero. Yo soy de Santiago de Cuba y los fines de semana hay tremendo aburrimiento en la UCI. Por eso nos unimos algunos estudiantes y venimos hasta aquí, nuestra especie de coliseo romano”, explica Mario Valles, estudiante de la UCI.

En las cercanías de la llamada “Autopista de San Antonio” se encuentra un punto de control de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR), cuyos agentes se han aparecido de repente en el sitio en varias ocasiones y se ha armado tremendo corre corre tanto de espectadores como de arañas.

“Aunque parezca mentira eso hasta nos divierte. Cuando se tira la policía lo que hacemos es mandarnos a correr para el monte. Ellos están en los carros patrulleros y nosotros a caballo o a pie. Nunca han detenido a nadie. Tal parece como si ellos también se divirtieran tratando de cogernos a nosotros y nos gritan que saben quiénes somos, pero de ahí no ha pasado la cosa. Algunos policías han venido en sus días de descanso vestidos de civil y hasta han apostado en las carreras”, cuenta un corredor de arañas identificado como Dayron.

Las opciones de recreación a precios asequibles escasean cada vez más en la isla. Los jóvenes (y los no tanto) se han visto obligados a buscar alternativas para divertirse y olvidar por momentos todos los problemas del día a día. Las carreras ilegales de motos, autos, caballos y “arañas” son, en la Cuba de hoy, una de las opciones más demandadas por gran parte de los jóvenes.