Luis Alberto López-Calleja es enterrado en una pequeña piedra, parecida a la de Fidel Castro, en Santiago de Cuba

Redacción

En la emisión “estelar” del Noticiero de la televisión estatal cubana, se transmitió la ceremonia de inhumación de las cenizas de dos destacados generales del régimen. El general de cuerpo de ejército Julio Casas Regueiro, fallecido en septiembre de 2011, y el general de división Luis Alberto Rodríguez López-Calleja, jefe de GAESA, conglomerado militar que controla sectores económicos lucrativos, cuyos restos ahora reposan en una piedra compartida en el Mausoleo del Segundo Frente Oriental Frank País. Dicha necrópolis alberga también a personalidades históricas como el español Antonio Gades y Vilma Espín, y en el futuro, según la voluntad del general, será el lugar de descanso final de Raúl Castro.

El acto estuvo presidido por la plana mayor del régimen cubano, con la participación destacada de Raúl Castro y el actual presidente, Miguel Díaz-Canel. El primer ministro Manuel Marrero Cruz ofreció las palabras centrales en medio de honores militares que incluyeron salvas de artillería. Además, familiares de los generales estuvieron presentes, entre ellos, Raúl Guillermo Rodríguez Castro, hijo del fallecido general y nieto de Castro, quien tuvo el honor de depositar la caja con las cenizas en la roca del Mausoleo.

El general Luis Alberto Rodríguez López-Calleja, conocido por su liderazgo en GAESA, falleció en La Habana el 1 de julio de 2022, debido a un “paro cardiorrespiratorio”. Más de siete meses después de su muerte, se dio a conocer que Ania Guillermina Lastres Morera, con rango de primer coronel y diputada en la X Legislatura de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP), lo sucedió al frente del poderoso conglomerado.

GAESA, un holding empresarial militar, opera en el hermetismo y no rinde cuentas ni a la Asamblea Nacional del Poder Popular ni a la Contraloría General de la República. Su funcionamiento es poco conocido por los cubanos, pero tiene el control sobre muchos de los negocios más lucrativos del país, especialmente en el sector turístico. Por su vinculación a este conglomerado, numerosas entidades han sido sancionadas por el Departamento de Estado de Estados Unidos.