¿Y dónde quedaron sus padres? Cerca de 800 menores cubanos no acompañados entraron por fronteras de EE.UU. en los últimos seis meses

Redacción

La migración cubana hacia Estados Unidos ha registrado cifras alarmantes, especialmente en lo que respecta a los menores no acompañados. Según la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos (CBP), unos 800 menores no acompañados cruzaron la frontera sur en el último semestre, con diciembre marcando el pico más alto del año fiscal 2024 (FY2024), que comenzó en octubre, con 168 menores llegados.

Este número, que alcanza un total de 791 menores en el semestre, aunque menor que los 1,183 registrados en el mismo periodo de 2023, supera significativamente los 231 de 2022, destacando una tendencia fluctuante pero preocupante en la migración infantil no acompañada.

El abogado de inmigración Angel Leal, en declaraciones a CiberCuba, explicó que estos menores son transferidos del Departamento de Seguridad Nacional (DHS/CBP) al Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos (HHS), específicamente a su Oficina de Reasentamiento de Refugiados (ORR). Esta oficina se encarga de establecer la custodia migratoria temporal del menor, y está diseñada para retener y procesar a los menores en el ambiente menos restrictivo y más seguro posible, no excediendo los 21 días.

Los menores no acompañados que llegan por puntos fronterizos están exentos de la deportación expedita y, en muchos casos, son enviados a albergues de Caridades Católicas. Sin embargo, en el caso de los cubanos, es común que los menores realicen la travesía con familiares o amigos y pasen poco tiempo en refugios antes de ser alojados con un tutor o un miembro de la familia ya establecido en Estados Unidos.

La situación de estos menores se enmarca dentro de una crisis migratoria más amplia, en la que muchos padres ven la emigración como la única alternativa para ofrecer a sus hijos una oportunidad de libertad. Además, hasta finales de marzo de 2024, un total de 86,000 cubanos han sido autorizados a viajar a Estados Unidos de manera segura, ordenada y legal a través del programa de parole humanitario introducido por la administración de Biden, según los datos proporcionados por CBP. Esta medida refleja los esfuerzos por regularizar y facilitar la entrada legal de migrantes cubanos al país.