Un ciudadano cubano ha sido sentenciado a 30 años de cárcel por el asesinato de un hombre en un incidente relacionado con un intento de salida ilegal del país, en el cual se perpetraron otros delitos adicionales.
Según un reportaje del Noticiero de televisión, el caso se inició con la investigación de la muerte de un hombre cuyo cuerpo fue hallado el año pasado en el municipio Boyeros, La Habana. Los investigadores, tras confirmar que la víctima fue asesinada con armas blancas y después de identificarla, determinaron que el móvil del crimen estaba vinculado a un plan de fuga del país, organizado por cuatro individuos encargados de construir una embarcación rudimentaria.
La víctima, quien inicialmente había acordado entregar su automóvil para el transporte, se retractó de su decisión y, como resultado, fue asesinada. Otro miembro del grupo procedió a robar el auto, desmontarlo y venderlo por partes.
Los participantes en este plan fueron arrestados, incluido uno que había escapado por mar y fue capturado por la Guardia Costera de Estados Unidos, quien lo entregó a las autoridades cubanas. De acuerdo con el reporte televisivo, todos admitieron su implicación en los hechos durante los interrogatorios.
Esta semana se llevó a cabo el juicio oral de la causa número 74 de 2023 en el Tribunal Provincial de La Habana. Además del individuo condenado por asesinato, otros cuatro acusados recibieron penas de entre 10 y 13 años de prisión por tráfico de personas. Por otro lado, dos personas acusadas de receptación fueron condenadas a penas menores.
