El 6 de junio, un impactante robo tuvo lugar en el Consejo Popular Sakenaf, Santa Clara, cuando un ladrón irrumpió en la casa de un trabajador por cuenta propia (TCP) que dirige una panadería local. El delincuente se llevó una asombrosa suma de cinco millones de pesos cubanos (CUP), dejando a la comunidad en estado de shock. Este incidente resalta la creciente inseguridad en la región y ha generado intensas discusiones sobre la gestión bancaria y la seguridad local.
El perfil de Facebook “Fuerza del Pueblo”, asociado al Ministerio del Interior (Minint) en la provincia de Villa Clara, reportó que el ladrón destrozó las tablillas de la persiana delantera de la casa del empresario, dirigiéndose directamente al lugar donde se encontraba el dinero. Esto sugiere que el delincuente conocía bien la actividad del propietario de la panadería y los detalles de su negocio.
El trabajador por cuenta propia explicó que tenía el dinero en su casa con la intención de comprar dólares para importar un contenedor de harina de trigo, un insumo crucial para la producción de pan y otros productos en su panadería. Esta explicación no solo refleja la fragilidad del sistema bancario cubano, sino también las complicaciones que enfrentan los empresarios locales en su esfuerzo por mantener operativos sus negocios.
La comunidad de Santa Clara, conmovida por el asalto, colaboró activamente con la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) y el Ministerio del Interior para identificar y capturar al culpable. Gracias a estos esfuerzos conjuntos, el autor del robo, identificado como Alinoeslan Larrondo, fue detenido después de varios días. Durante la operación, las autoridades lograron recuperar una motorina y dos cadenas de oro que Larrondo había adquirido con el dinero robado.
Este hecho ha provocado un acalorado debate en las redes sociales, donde los comentarios reflejan una mezcla de escepticismo, temor y exigencias de acciones más firmes por parte de las autoridades. Un usuario, por ejemplo, expresó su pesimismo respecto a la efectividad del sistema judicial, diciendo: “Todo está muy lindo, pero apuesto lo que sea que en menos de una semana está en la calle, así lo veo con la mayoría de los casos que ponen acá”. Este comentario pone en evidencia la desconfianza generalizada en la justicia cubana.
Otro usuario comparó la situación en Cuba con la de Colombia, señalando la creciente sensación de inseguridad: “Estamos ya peor que Colombia con qué temor se vive en Cuba, no se puede salir de noche, no puedes dejar la casa sola, nadie le pone freno a esto, parece una película de terror”. Esta declaración resalta el clima de miedo que impregna la vida cotidiana en la isla.
La demanda de medidas más estrictas es una constante en varias publicaciones. Un usuario pidió mayor rigor en la aplicación de la ley: “Ya es hora de ponerle freno a la delincuencia y lo que hace falta es que pongan mano dura y que se termine la tolerancia porque no se hace nada si no aplican la ley que lleva para terminar con estos problemas”.
Finalmente, la magnitud del dinero robado también ha generado críticas sobre la gestión bancaria en Cuba. Un comentario en redes sociales resumió esta preocupación: “Lo que más me asombra de todo esto son los 5 millones de CUP. Tiene más dinero que todos los cajeros de la provincia. He ahí porque los que cobramos por una tarjeta no podemos sacar el dinero del banco. Súmale esto a los cientos de mipymeros que hay… El banco está vacío señores”.
En un incidente separado, también en Santa Clara, un joven fue detenido infraganti mientras robaba un banco en el parque del Consejo Popular José Martí. El joven, identificado como Andy, confesó su implicación en otros cinco robos de bancos para sentarse, afectando la comodidad y tranquilidad de los vecinos. Las autoridades locales enfatizan la necesidad de enfrentar con firmeza los actos delictivos que deterioran la ciudad y perjudican a sus habitantes.
