Los cubanos enfrentan actualmente una preocupante situación debido a los elevados precios en el país, y aunque la temporada de aguacates aún no ha llegado, satisfacer ese antojo se está volviendo costoso para muchos.
Según informes de una fuente anónima en La Habana, el precio de cada aguacate alcanza los 180 pesos, lo que ha generado indignación entre los ciudadanos. Una persona cuestionó desde la capital cubana: “Esto es horrible. ¿De dónde sacar el dinero para comprar un sabroso aguacate?”.
Testimonios de diferentes regiones de Cuba reflejan la preocupación por los precios desorbitados de esta fruta. Un cubano residente en Centro Habana mencionó que hace una semana compró un aguacate a 250 pesos, pero esta semana bajó a 150 pesos, lo cual, aunque representa un alivio, sigue siendo una cantidad significativa.
En otros lugares como en El Bosque de Plaza de Méndez, Camagüey, se han reportado precios de hasta 500 pesos por aguacate. Ciego de Ávila, Matanzas y Santiago de Cuba también experimentan incrementos considerables en el costo de esta fruta tan apreciada.
Estas cifras alarmantes generan preocupación entre los ciudadanos, quienes expresan su frustración y decepción ante la difícil realidad económica que enfrentan. Una cubana lamentó: “Si fuera solo el aguacate, no sé hasta dónde vamos a llegar. Es triste ver la realidad que estamos viviendo, una realidad que afecta especialmente la economía personal de los cubanos que dependen únicamente de sus salarios”.
El testimonio de una ciudadana de La Habana refleja la difícil situación de los jubilados que viven con una pensión mínima de 1578 pesos. Ella menciona: “No podemos comer nada. Dependemos de lo poco o nada que ofrece la bodega. Siete libras de arroz de mala calidad para todo el mes, un poco de frijoles cuando hay. Azúcar y 250 mililitros de aceite, cuando hay suministro. El resto del tiempo, nos encontramos con la mandíbula colgando de un clavo. Tenemos que clavar clavos en la pared para sostener nuestras mandíbulas. Cuba, qué linda es Cuba”.
