Díaz-Canel llega a Rusia con tremenda pinta de millonario mientras deja al pueblo pasando hambre en la isla

Redacción

La visita del gobernante cubano Miguel Díaz-Canel a Rusia, anunciada sin previo aviso, tiene como objetivo abordar temas prioritarios en la agenda bilateral entre ambos países. Acompañado de su esposa Lis Cuesta Peraza, Díaz-Canel se reunió con el presidente ruso Vladimir Putin, en un viaje que se extenderá hasta el 9 de mayo, fecha en la que Cuba celebra el “79 aniversario de la victoria en la Gran Guerra Patria”.

La comitiva cubana incluye al canciller Bruno Rodríguez Parrilla, el jefe del Departamento de Relaciones Internacionales del Comité Central del PCC, Emilio Rodríguez Losada, el viceministro primero de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera (MINCEX), Oscar Pérez-Oliva Fraga, el embajador en Moscú, Julio Garmendia Peña, y otros funcionarios de la cancillería cubana.

Durante su estancia, Díaz-Canel participará en una reunión de la Unión Económica Euroasiática (UEEA), de la cual Cuba es Estado observador desde 2020. Esta será la primera vez que participe en el Consejo Supremo de la organización, en la que Cuba estaría dispuesta a ceder terrenos en la Zona Especial de Desarrollo (ZED) del Mariel por 50 años.

El líder cubano también asistirá al desfile militar y otras actividades conmemorativas en Moscú, en un contexto en el que Rusia enfrenta críticas por su agresión en Ucrania. A pesar de las tensiones, Díaz-Canel profundiza la relación de dependencia entre Cuba y Rusia, mostrando un respaldo continuo al gobierno ruso y sus políticas.

Esta visita refuerza la alianza entre ambos países, pero también suscita críticas por parte de aquellos que consideran que Cuba está comprometiendo su soberanía y dignidad al mantener una relación estrecha con Rusia. Sin embargo, para Díaz-Canel, este viaje representa una oportunidad para asegurar apoyo estratégico y beneficios para el régimen cubano.