El abogado y activista Manuel Viera ha expresado su indignación en redes sociales ante el alarmante precio de los huevos en La Habana, que ha llegado a alcanzar los 3,500 pesos cubanos por cartón. A través de un video en su perfil de Facebook, Viera, conocido por sus críticas al gobierno cubano, mostró su descontento sosteniendo un huevo y comentando sobre su elevado costo, equivalente a 120 pesos por unidad.
Viera ironizó sobre la calidad del producto, refiriéndose a él como un “huevo con anemia blanca y clara transparente”, y bromeó sobre la posibilidad de que se conviertan en pollitos antes de que él decida comprarlos a ese precio. Al confrontar al vendedor sobre el exorbitante aumento, que representa un 20% más que el precio anterior, el vendedor justificó la subida alegando la influencia del dólar en el mercado, lo que provocó risas entre ambos ante la absurda explicación.
Este incremento en el precio de los huevos no es un fenómeno reciente, ya que desde finales del año pasado los costos han sido excesivamente altos, convirtiendo a este alimento básico en un artículo de lujo para muchos cubanos. Investigaciones recientes indican que el precio del cartón de huevos había alcanzado los 2,700 pesos cubanos en febrero, una cifra aún superior al salario mínimo en la isla, que es de 2,100 CUP.
La situación ha llevado a voces como la de Luis Sosa Aragón, otro ciudadano cubano, a denunciar la inaccesibilidad de precios y la falta de productos básicos para la población, mientras que las Mipymes, vinculadas al Estado, parecen tener disponibilidad de estos. Sosa Aragón expresó su frustración ante la escasez y las políticas excluyentes del gobierno, resumiendo la situación con un enfático “No tenemos nada, de nada, de nada”.
Ante la grave escasez, Cuba ha recurrido a la importación de huevos, destacando un reciente envío desde Colombia que consistió en dos contenedores con un total de 518,400 huevos, fruto de un acuerdo alcanzado durante la Feria Internacional de La Habana (Fihav).
Curiosamente, en medio de esta crisis, algunos cubanos han reportado en redes sociales la aparición de huevos con yemas blancas en la distribución normada, describiéndolos como carentes de olor y sabor, lo que añade otra capa de peculiaridad a la ya compleja situación alimentaria en la isla.
