La empresa Richmeat de Cuba S.A., especializada en la producción y distribución de productos cárnicos como el picadillo, ha sido galardonada con la distinción de “Vanguardia Nacional” por tercer año consecutivo. A pesar de las severas dificultades que enfrenta la industria alimentaria del país y el riesgo palpable de inseguridad alimentaria que afecta a muchos, las autoridades sindicales del régimen cubano han decidido premiar a esta planta procesadora por “la eficiencia y la calidad de su producción”.
El reconocimiento fue otorgado en un evento en la Zona Especial de Desarrollo (ZED) Mariel, con la presencia de Jorge Luis Fajardo Casas, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria Alimentaria y la Pesca, aunque el nuevo ministro de la Industria Alimentaria, Alberto López Díaz, no estuvo presente. Unos cien trabajadores de Richmeat de Cuba participaron en la ceremonia.
Desde su inauguración el 24 de enero de 2020, esta empresa, la primera de su tipo en la ZED Mariel y resultado de un proyecto de inversión extranjera de México, ha mostrado un crecimiento constante. En marzo de 2023, reportó una producción mensual de más de 2,000 toneladas métricas de picadillo, un notable incremento desde sus inicios.
Yipsian Román Rodríguez, secretaria general de la sección sindical de Richmeat, expresó en una entrevista con el Noticiero de la Televisión Cubana (NTV) su orgullo por la capacidad de la empresa de abastecer las mesas cubanas, a pesar de la escasez generalizada y los altos precios de los alimentos en tiendas en moneda libremente convertible (MLC).
La distinción llega en un momento controvertido, tras la denuncia de un caso grave de maltrato animal y la venta de carne de perros como picadillo, lo que provocó un repudio generalizado y cuestionamientos sobre las prácticas éticas dentro de la industria cárnica. Aunque el Gobierno inicialmente negó las acusaciones, la evidencia presentada por activistas llevó a una condena oficial y promesas de acciones legales.
La situación alimentaria en Cuba sigue siendo crítica, con muchos cubanos luchando por acceder a productos básicos a precios asequibles. El salario mínimo (2,100 CUP) equivale a aproximadamente 6 dólares al mes al cambio informal, mientras que los precios de productos básicos como el picadillo de Richmeat oscilan entre 2.60 y 3.00 dólares por 400 gramos.
Este contexto destaca el desafío continuo para muchos cubanos que, a pesar de las afirmaciones oficiales, no encuentran en su realidad cotidiana el reflejo del “orgullo” proclamado por funcionarios de Richmeat. La empresa, que fue inaugurada por el presidente Miguel Díaz-Canel, es vista como parte de un esfuerzo más amplio por modernizar la economía, aunque las críticas apuntan a una privatización opaca de activos y un distanciamiento del modelo socialista prometido por el régimen.
